Somos una Institución que recoge 200 años de las más ricas tradiciones de servicio a nuestra nación. Las virtudes fundamentales que la Institución cultiva son honor, valor, lealtad, integridad, disciplina, espíritu militar, espíritu de cuerpo y prudencia; son ellas sobre las cuales se han edificado nuestro más rico patrimonio y capital, que es nuestro equipo humano.

Este equipo conformado por hombres y mujeres, son y seguirán siendo fuente de poder desde donde emana nuestra verdadera fortaleza.

Los hechos acaecidos en el día de ayer, los cuales han dejado como saldo el asesinato de tres de nuestros hombres, nos ha golpeado muy duro, sin lugar a duda en donde más nos duele, que es en nuestra gente.

Sabemos la relevancia que tiene el factor moral, en una fuerza como la nuestra en la que sus integrantes arriesgan lo más preciado para ellos mismos, su vida. Justamente ha sido la fortaleza moral el elemento multiplicador que caracterizó a esta Fuerza Naval en general, y a la Infantería de Marina en particular. Así como antes no ha impedido, hoy tampoco impedirá, que asumamos todos con coraje y decisión los desafíos que implican el cumplimiento de nuestra indelegable misión.

Hoy en momentos que todos necesitamos de todos, como pasa en los grandes equipos, y la Armada Nacional es un gran equipo. Por tanto, como su Comandante en Jefe, hoy más que nunca les pido, espíritu de cuerpo y valor para transitar por el dolor, prudencia para hacer un profundo análisis de lo sucedido y aclarar los hechos, y razón para que no nos gane la impotencia y la pasión.

Como su Comandante me comprometo a proceder con lealtad y firmeza para tomar las decisiones necesarias que nos permitan proteger a nuestras tripulaciones, pero siempre manteniendo el rumbo firme para que la Armada Nacional continúe navegando en procura de los destinos que la realidad nacional nos impone.

 

Almirante Jorge Wilson

Comandante en Jefe de la Armada Nacional